miércoles, 14 de octubre de 2015

"Recupere su Pasado"



¡¿Por qué el mundo cada vez es más gris?! Con ojos inocentes observo  con lupa y desde fuera aquellas personas…,  aquellas personas que antes eran parte de mi, como esa esquina doblada del libro que marcó tu vida. Esa página, para volverla a leer hasta el fin de los tiempos. Ahora, todo eso está perdido. Viviendo hasta ahora en un jardín donde nunca llueve, y el aroma de las flores perdura… nos hemos mudado todos juntos al alcantarillado. Hemos finalmente firmado los papeles para huir. ¿Huir? ¿Huir al infierno? ¿Es quizás la muerte putrefacta y el hedor de las sombras mejor que el aroma insustituible de las flores primaverales y el sol incesante? Todos diríamos que no pero la cruda realidad es que hemos hecho todos juntos la maleta, e inconscientes, hemos descendido al lugar que no conoce la luz natural, al lugar donde las aguas residuales de la sociedad nos queman la piel y nos reducen lentamente, y pasamos de ser los seres casi humanos a una simple marioneta. Si quiero que cambien las cosas y vuelvan a estar como estuvieron en un pasado, tengo que cambiarlo yo. Los demás ya están muertos.

Salgo a la calle y me dirijo al establecimiento de fachada azul celeste y de escaparate llamativo. Justo encima de la puerta de entrada baila un cartel de madera raída y repintado varias veces por la misma pintura alegre y serena de la fachada. El cartel dice en potentes letras blancas: “Recupere su Pasado” Al mismo tiempo que leo el cartel, un hombre de barba larga y con un bastón en la mano pone un candado en la puerta del local. Yo le pregunto: ¿Perdone, está usted cerrando la tienda? El hombre gira y se queda mirándome. Tras unos segundos masculla: “Las cosas ya no son como eran antes, nadie puede volver atrás, por que estamos sometidos a la fría y dura coraza del presente. De echo, nunca fuimos capaces de conseguir aquello que tanto añorábamos, lo intentamos, pero nunca lo conseguimos. ¿Quieres que todo siga como antes? Tú no puedes hacer nada”.


El hombre se aleja de mi calle abajo. Mientras, yo, reflexiono. ¿Sometidos a la fría y dura coraza del presente? Si de verdad estoy sometido a tal arduo destino, prefiero vivir en mis recuerdos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario